Entorno de trabajo
Entre todos los deportes el fútbol es el deporte más popular del mundo con cerca de 200 millones de personas que lo practican. La RFEXF tiene 350 clubes federados, lo que implica que semanalmente se celebran aproximadamente, 800 partidos entre los 1600 equipos existentes. Esto supone una masa poblacional directa de 8000 individuos más el publico asistente que puede aproximarse a 100.000 personas.
Durante un partido medio se realizan combinaciones de esprín de corta duración, carreras de alta intensidad, saltos, duelos, cambios de ritmo, cambios de dirección, marcha atrás y episodios de caminar y pararse. Intensidad física que varía según la posición del jugador en el terreno de juego. La frecuencia cardíaca media en partidos de fútbol oscila entre las 165 y 175 pulsaciones por minuto, tanto en partidos competitivos como amistosos.
En relación con la edad, existen peculiaridades tanto en futbolistas jóvenes como mayores. En categorías inferiores la frecuencia cardíaca media de los jugadores de fútbol juvenil superó las 170 pulsaciones por minuto durante el 84 % de los 90 minutos en partidos oficiales. Por el contrario, los valores absolutos de frecuencia cardiaca oscilaban entre 120 y 140 pulsaciones para futbolistas aficionados mayores.
El sobreesfuerzo deportivo junto con las contusiones y golpes propios de la actividad deportiva pueden derivar en arritmias o, en el peor de los casos, en una parada cardiorrespiratoria súbita. La muerte súbita puede ocurrir y ha ocurrido en ocasiones en los campos de fútbol u otras instalaciones deportivas que son espacios de tiempo y lugar con una alta probabilidad de sufrir un episodio de parada cardiorrespiratoria.
Los jóvenes deportistas y el personal al cargo de las instalaciones son una población favorable para el aprendizaje y proactiva aplicando las medidas de resucitación. Todo centro deportivo o club debería de tener un plan de actuación urgente, idealmente escrito, que garantice a las víctimas de la parada cardiaca la mejor atención.
- Para prevenir la muerte súbita, la cardioprotección en deporte debe incluir de forma obligatoria:
- Análisis de la instalación deportiva
- Instalación de punto de rescate cardiaco o desfibrilador
- Formación homologada en RCP para toda la plantilla
- Certificación como espacio cardioprotegido
Fundamentos teóricos
Las posibilidades de sobrevivir a una parada cardiaca secundaria a una arritmia ventricular en dependencias deportivas oscilan entre el 5 y el 10%. La reanimación debe empezarse de forma extraordinariamente precoz, por cada minuto que pasa las posibilidades de sobrevivir disminuyen un 10% por lo que al cabo de 10 minutos estas posibilidades son mínimas.
Para mejorar el pronóstico y la atención a la parada cardiaca en el contexto del deporte y de la actividad física hay definidas una serie de actuaciones que son vitales y forman parte de lo que se ha definido como cadena de supervivencia. Lo más importante es el comienzo precoz de compresiones torácicas y el poder disponer en el entorno deportivo de un Desfibrilador Semiautomático (DEA) dentro de un programa de cardio-protección coordinado.
Idealmente la Reanimación Cardiopulmonar (RCP) debe de empezar en menos de 3 minutos del comienzo del episodio según las guías del European Resucitation Council de 2015.
La desfibrilación llevada a cabo por testigos y primeros intervinientes está asociada a una mayor tasa de supervivencia con una media del 53%, mientras que si la desfibrilación es llevada a cabo cuando llega la primera ambulancia la tasa de supervivencia decae al 28,6%, a los 8-11 minutos después de la parada.
La cardioprotección de los entrenamientos y partidos de los clubes, en todas sus categorías, garantiza una rápida asistencia de la posible víctima, siguiendo un protocolo de actuación, ya sea la víctima un/a deportista, trabajador/a de las dependencias o público que asiste a los estadios.
Convenio de colaboración
Así pues, la Federación Extremeña de Futbol de conformidad con lo anteriormente expuesto, toma conciencia y acuerda suscribir el presente convenio con SEMES Extremadura, para desarrollar un programa específico dirigido a los clubes federados en nuestra Comunidad Autónoma para un adecuado entrenamiento de sus trabajadores a la desfibrilación temprana y a la enseñanza de las maniobras básicas de reanimación cardiopulmonar. A ello habrá que implementar la planificación y dotación de los medios y equipamiento de cardio protección con el cual revertir una parada cardíaca en prácticas deportivas.
La formación propuesta establece el reconocimiento de síntomas de este tipo de emergencias, instruir sobre cómo actuar frente a ellas y como poner en marcha el conjunto de acciones sucesivas y coordinadas que permita la reanimación cardiopulmonar a las víctimas de una parada cardíaca (cadena de supervivencia).
Como cadena, está constituida por una serie de eslabones (acciones) que son fundamentales para que sea eficaz. No puede haber un eslabón débil. Todos se tienen que ejecutar con escrupulosa precisión para mejorar el pronóstico de la víctima.
Los eslabones serían los siguientes:
1) Llamar: esto requiere reconocer inmediatamente la parada cardiaca y llamar al 112 para activar el servicio médico de emergencia que realizará la desfibrilación y la resucitación avanzada. Esta medida es la que permite demorar lo mínimo posible la desfibrilación si no estuviera disponible.
2) Reanimar: reanimación cardiopulmonar (RCP) precoz dando prioridad a las compresiones torácicas de calidad. Un masaje cardiaco de calidad asegura un aporte de sangre y oxígeno al corazón y al cerebro hasta que se restablezca el ritmo del corazón. Resta explicar el efecto beneficioso de la RCP en las posibilidades de recuperar el ritmo cardiaco y de preservar la función neurológica.
3) Desfibrilar: en el adulto, la mayoría de las paradas cardiorrespiratorias tienen un origen cardiológico y el ritmo cardiaco más común es la fibrilación ventricular. La única forma de transformar este ritmo potencialmente letal en un ritmo normal es a través de la desfibrilación precoz (aplicar rápidamente el desfibrilador externo automático o DEA). Cada segundo de demora en la desfibrilación es de vital importancia en la posibilidad de recuperar el ritmo y preservar la función neurológica.
4) Tratar y monitorizar: medidas de reanimación avanzadas para estabilizar al paciente y trasladarlo a una unidad de cuidados intensivos por parte de los servicios sanitarios
Los cursos que se proponen son cursos de Soporte Vital Básico (SVB) y uso del DEA que tienen como principal objetivo capacitar a través de conocimientos básicos y destrezas a los/as participantes en caso de tener que atender a una persona que sufra una parada cardiorrespiratoria, previamente a la llegada de las asistencias sanitarias.
Los cursos están dirigidos a personal no sanitario que trabajan en las instalaciones deportivas de la Federación Extremeña de Fútbol, o en su caso municipales, como son: entrenadores/as, monitores/as de actividades físico-deportivas, personal de instalaciones deportivas, directivos, etc.
El objetivo último de esta colaboración es que los clubes pertenecientes a la Federación Extremeña de Futbol sean clubes cardioprotegidos, comprometidos contra la muerte súbita adoptando medidas con la dotación de equipamiento, ubicación y señalización adecuada de los DEAs, con el mantenimiento adecuado de los mismos y la formación de su equipo técnico en técnicas de RCP y uso del DEA, la formación y el reciclaje de las maniobras y protocolo de la reanimación cardiopulmonar RCP con el uso del desfibrilador DEA a realizar cada 2 años.